martes, 1 de abril de 2008

Why does every moment have to be so hard?... Hard to believe it

Creo que a veces nos toca experimentar cosas totalmente distorcionadas a lo que nos gustaría, tal vez por que los mil intentos fueron fallidos o no salieron como queríamos y eso, nos tira totalmente abajo y a una negativa horrenda…
Terminamos sintiendo que todo el esfuerzo que podemos estar poniendo en algo y el empeño en poder, como pasa en algunos casos, de remediar algo que se rompió , más allá de quien haya sido el culpable, se termina sintiendo en vano , una perdida de tiempo, plata, y un desgaste emocional totalmente enorme, que nos arranca las ganas de todo…
Si, nos arranca, por que nosotros en realidad lo que menos queremos es desistir, lo que menos queremos es alejarnos, lo que menos queremos es, perderlo, pero los resultados hacen que tengamos que “ soltar la rienda” y que las cosas vayan, o en su defecto más crudo, cortar por lo sano.
Son las miles de incertidumbres que , después de “cada cortada de rostro” se hace más grande y nos llevan a analizar, para que estamos haciendo eso.
En este caso, vamos a meternos mas de lleno…
De que sirve seguir insistiendo en no querer perder a alguien ( teniendo en cuenta que, además de nuestro propio deseo personal, se suponía que también era un deseo compartido) ?

Cosas que pasan a más de uno, hasta podría decir, a todos…
Que nos dejen re plantadas hasta con una simple respuesta a un sms y que por ejemplo después, ni siquiera nos entreguen ( ja! Hasta una mentira es permitida) un “ no tenia crédito”, “no me llego” “ che, sobre el mensaje tal y tal cosa”, pero no… hasta se termina sintiendo que es apropósito.
Y en esto, no es una cuestión de echar en cara nada, por que como bien sabemos, la situación ni siquiera lo amerita y es ahí donde, vagamente, el sentimiento de “ basura” se hace presente junto con el bendito “ que onda?”
Como para que uno pueda entender…

Y ahí empezamos a pensar, que si la intención hacia nosotros es que nos sintamos como mierditas, se están saliendo con la suya.
Una siente que realmente, no quiere cortar lazos y que en realidad , es todo lo contrario…
Tal vez después de cierta cantidad de tiempo compartido con esa persona, lo que uno capaz menos quiere es cortarse, pero se hace imposible…

¡Pero lo que uno realmente quiere es estar bien! Que la cosa sea mutua! Cumplir con lo pactado!


Pero no … eso no se cumple ni siquiera por aproximación, por que cuando se tiene la posibilidad de poder dialogar, se termina sintiendo que se hablara con un ser desconocido.
Como si todo el pasado no hubiera existido.
Como si no quedaran cosas por hablar…
Como si la duda no sea mutua…

Es sentir que las manitas empezaron a arder y que la nariz está volviendo a picar devuelta…

Dudas grandes existenciales, de esas que, personamente, jamás voy a poder entender ni siquiera saber…


Te espero o te dejo ir ? Que es lo que realmente deseas?

Y las palabras de de “ libertad” no sirven en lo absoluto.
Dan ganas de gritar “ PERO POR DIOS!! JATE JODER!!! PEDIME LO QUE QUIERAS!!! ( lease… LO QUE MAS QUIERO ES QUE ME PIDAS QUE ESPERE POR VOS)



En lo personal, después de haber escuchado una historia basada en este escrito, más sumándola a una experiencia personal, tengo dos solas preguntas que hacer... ( y va dirigida a la mente de muchos)

Si una persona a la voz del alba dice “ QUE NO TE QUIERO MÁS” pero cuando apenas aparece la luna, no duda en volver a la morada… y luego, se niega a quedarse a dormir… pregunto…



No fue acaso suficiente?
Cuando fue la última vez que te quisieron tanto?

No hay comentarios:

Publicar un comentario